martes, 26 de septiembre de 2017

ANCÓN, ANCÓN










El Festival de Ancón fue un evento que engalanó nuestra canción durante los 60’s y 70’s. Era nuestro pequeño San Remo, nuestro modesto Viña del Mar. Un concurso de canciones donde también podías gozar con invitados locales e internacionales. Para los 80’s cayó en el aburrimiento y desapareció. Intentaron revivirlo en alguna oportunidad, pero no pasó nada.

Uno de estos intentos se dio a inicio de los 90’s. Las reglas decían que podías presentar dos canciones y –que si a los del jurado les gustaba- pues te daban la opción de cantarla tú mismo o de contratar a algún cantor profesional para que la interprete. Muchos compositores comenzaron a mandar sus creaciones. Algunos salían con disgusto pues les rechazaban todas. De otros, el jurado escogía una. Un amigo, Javier Orihuela (de La Banda del Dr. Poggy), presentó dos temas y le aceptaron uno, llenándolo de entusiasmo. Tanto que me sugirió –a mí- que mande un par de canciones, que no perdía nada… En son de broma envié dos temas: “Si Alguna Vez Vuelvo a Verte” y “Cuando la dignidad Murió en su Intento por Amar”. Y envié esas porque las grabaciones estaban en la recientemente editada maqueta “Los Arrastrados”, un demo que no circuló mucho. … Para mi sorpresa, las dos fueron aceptadas y, según Javier que siempre husmeaba por las oficinas del Festival, ambas canciones gozaban de cierto entusiasmo y les auguraban unos buenos puestos.

foto: sitevas.blogspot.com
El lío es que yo no tenía banda. Así que llamé a mi compadre Pancho Muller para armar un combo únicamente para la ocasión. Y así lo hicimos. Ensayamos un par de veces en su sala y –la verdad- todo sonaba una tremenda mierda. Así que decidimos no participar, pero que de todas formas iríamos al Festival al menos para pasar el rato y divertirnos tras bambalinas. Nuestra excusa para no tocar fue que “nuestro acordeonista todavía no llega”… Y los organizadores nos amenazaban diciendo: “Miren que si no viene, pierden su turno”… 


Al final la pasamos bacán. Vimos todo el Festival y, como invitados, estuvieron Frágil, Dudó y alguno más, regresando luego a casa como si hubiéramos ganado una medalla. Linda experiencia, aunque subsiste la pregunta: ¿Qué hubiera pasado si la banda hubiera cuajado bien y hubiésemos llegado a participar?...